En el ámbito laboral, el conocido dicho de que “el tiempo es oro” se cumple a la perfección. La legislación laboral establece plazos muy cortos para tomar medidas legales, y una vez que se superan estos plazos, ya no es posible reclamar los perjuicios sufridos. Por lo tanto, es de suma importancia ponerse en contacto con un profesional experimentado desde el mismo momento en que surge un conflicto. La necesidad de actuar con rapidez y contar con la experiencia adecuada es la clave del éxito en nuestro bufete de abogados laboralistas en Málaga.

El derecho laboral surge de la necesidad de regular las relaciones que se generan como resultado del trabajo asalariado. Es un derecho que siempre está en evolución, adaptándose a los cambios sociales y a las necesidades específicas de la producción de bienes y servicios. El trabajo es uno de los activos más valiosos de las personas en nuestra sociedad, y es precisamente bajo esta premisa que nos dedicamos a resolver los conflictos laborales de nuestros clientes.

¿Cómo enfrentar un despido?

El despido es una de las razones por las cuales se pone fin a la relación laboral. Se caracteriza por ser un acto unilateral por parte del empleador y debe estar respaldado por una causa justificada. La legislación contempla varios tipos de despidos según la forma y la causa que alegue el empleador.

Sin importar cómo se haya llevado a cabo, en Castaño Asociados (Abogados y Asesores) analizaremos el caso específico de cada cliente con el objetivo de garantizar sus derechos ante esta situación.

Lo más importante cuando se enfrenta un despido es actuar con rapidez, ya que el plazo para oponerse es de solo 20 días hábiles. Por esta razón, es fundamental acudir a un abogado especializado lo antes posible. En cuanto a la documentación que se recibe en ese momento, es esencial conservar una copia original y firmarla con la indicación “no conforme” para poder reclamar lo que corresponde en el futuro.

Para poder tomar medidas eficaces ante un despido, solicitamos a nuestros clientes que nos proporcionen toda la documentación que el empleador les haya entregado. Los documentos necesarios para presentar a un abogado en caso de despido son cruciales para iniciar reclamaciones posteriores con éxito.

Carta de despido:

Este documento constituye la notificación oficial del despido. Debe incluir la causa del mismo, los motivos que lo justifican y la fecha exacta en que surte efecto. La falta de estos requisitos podría resultar en la improcedencia del despido. Esta carta se puede entregar en persona o por cualquier medio que garantice su recepción. Siempre recomendamos firmar todas las páginas con la expresión “no conforme” y la fecha de recepción.

Propuesta de liquidación:

Esta propuesta, comúnmente conocida como finiquito, incluye todas las deudas pendientes derivadas de la relación laboral entre el trabajador y el empleador. Es frecuente que el empleador utilice este documento para obtener la renuncia del trabajador a emprender acciones legales contra él. A pesar de que la ley establece que el trabajador no puede renunciar a sus derechos, es conveniente firmar el documento con la indicación “no conforme” para preservar el derecho a futuras reclamaciones.

Certificado de empresa:

Este documento certifica la situación de desempleo una vez finalizada la relación laboral, independientemente de la causa de terminación. El certificado de empresa establece el derecho a recibir prestaciones por parte del Estado, conocido como Desempleo, junto con el monto correspondiente. El empleador está obligado a enviar este certificado al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE, anteriormente conocido como INEM) en un plazo de 10 días a partir de la finalización del vínculo laboral.

La conciliación laboral:

El proceso de conciliación se establece para resolver conflictos entre el trabajador y el empleador de manera extrajudicial. La conciliación es un paso previo a la presentación de una demanda laboral y consiste en intentar llegar a un acuerdo que, de lograrse, se documenta en un acta de conciliación y evita la vía judicial. Este acuerdo no requiere la ratificación de un juez y es de obligado cumplimiento para ambas partes.

La conciliación laboral es un mecanismo contemplado para la resolución de conflictos laborales, siendo más comúnmente utilizada para reclamar un despido improcedente o montos pendientes de pago por parte del empleador. Una negociación exitosa en un conflicto laboral permite a nuestros clientes evitar el proceso judicial, solucionar sus problemas de manera rápida y ahorrar costos, todo mientras un experto garantiza sus derechos.

“Un acuerdo de conciliación exitoso es la mayor satisfacción para un cliente asistido por Castaño Asociados (Abogados y Asesores).”

Este fue el caso reciente de uno de nuestros clientes, Luis R.L. Nos contactó a través de la recomendación de un amigo, presentando un caso complejo debido a las dificultades económicas que atravesaba su empresa. Luis había sido empleado durante dos años en una pequeña empresa dedicada a la venta de automóviles. Le adeudaban varias nóminas atrasadas, y a pesar de las promesas de su jefe de que se las pagarían al mes siguiente, los meses seguían pasando sin mejoras.

Tras un primer contacto telefónico, nos reunimos con Luis R.L en nuestras oficinas para revisar la documentación y analizar el caso desde cero. Después de examinar su contrato de trabajo y las últimas nóminas recibidas, llegamos a la conclusión de que la empresa le debía 5 nóminas atrasadas, y la sexta estaba a punto de vencer. El monto total adeudado ascendía a 7.118,40€.

Nuestra primera acción fue presentar una Papeleta de Conciliación laboral relacionada con la extinción del contrato debido al impago salarial (Art.50 del ET) y la reclamación de estas cantidades pendientes. Nuestro objetivo era actuar con prontitud, ya que la difícil situación económica de la empresa podría llevarla a declararse en concurso de acreedores en cualquier momento, lo que complicaría aún más el proceso de cobro salarial al tener que recurrir al FOGASA. Además, esta reclamación a su empleador constituía un poderoso instrumento de negociación.

El impago de salarios genera el derecho a solicitar la extinción de la relación laboral con la recuperación de las sumas pendientes y la correspondiente indemnización por despido improcedente.

Cuando supimos que la empresa de Luis había recibido la notificación para comparecer ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC), nos pusimos en contacto con ellos para iniciar las negociaciones. Después de un primer contacto no muy fructífero, logramos persuadir al empleador de que la mejor opción era negociar y evitar un litigio judicial. Tras varias conversaciones y un par de reuniones, logramos un acuerdo para que, durante un año, junto con su salario, se le pagara una cantidad mensual de 593,2€ (7.118,40 €/12).

Este acuerdo oportuno representó una ventaja significativa para Luis R.L al evitar un proceso judicial que, sin duda, habría sido largo y habría acumulado más nóminas impagadas.

Contacta con nosotros

¿Con qué oficina quieres contactar?
MadridMálaga